En los últimos años, la posibilidad de cambiar el color de los ojos ha despertado un gran interés. Aunque las lentes de contacto de colores siguen siendo una opción temporal, algunos buscan una solución permanente. Sin embargo, más allá de la estética, existen causas médicas que pueden llevar a una persona a considerar esta cirugía.
¿Cómo cambiar el color de ojos?
Actualmente, hay dos métodos principales para modificar el color de los ojos:
- Implante de iris artificial: Se introduce un implante de silicona de color sobre el iris natural. Es un procedimiento quirúrgico que puede tener consecuencias graves, como el aumento de la presión intraocular y el daño en la córnea.
- Despigmentación láser: Mediante el uso de un láser de baja intensidad, se reduce la cantidad de melanina en el iris, aclarando progresivamente el color de los ojos. Este procedimiento es irreversible y puede desencadenar fotofobia, inflamación o incluso glaucoma.
Ambos métodos deben ser evaluados con extrema precaución, ya que pueden causar daños permanentes en la visión. En la Clínica Ocular Antonio Moreno, recomendamos un análisis detallado antes de considerar cualquier tipo de intervención.
¿Es posible cambiar el color de los ojos?
Sí, pero con riesgos significativos. La operación solo debe realizarse en centros especializados, ya que puede causar efectos adversos como glaucoma, queratitis o daños en la córnea. Además, en algunos casos, el cuerpo puede rechazar el implante de iris artificial.
Es fundamental que el paciente se someta a una evaluación oftalmológica exhaustiva para determinar si su salud ocular es compatible con este tipo de cirugía.
Queratopigmentación (inyección de colorante en córnea)
Otra técnica menos conocida, pero que también existe, es la queratopigmentación, también llamada tatuaje corneal. Consiste en introducir un pigmento directamente en la córnea, la parte transparente del ojo, mediante un canal muy fino o incluso con la ayuda de un láser. Es, básicamente, como meter un poquito de colorante por un tubo microscópico en la córnea.
Aunque en sus inicios se usaba con fines médicos para disimular cicatrices o lesiones corneales, hoy en día se ha adaptado también con fines estéticos. Puede cambiar el color del ojo de forma permanente, sin necesidad de implantes ni lentes de contacto.
El procedimiento puede hacerse manualmente o con tecnología láser (como el láser de femtosegundo), que permite una aplicación más precisa del pigmento. Se utilizan colorantes especiales, compatibles con los tejidos oculares, y el resultado final depende mucho de la pericia del especialista.
Ahora bien, no todo es color de rosa: al tratarse de un procedimiento irreversible, conlleva ciertos riesgos, como inflamación, mala distribución del pigmento o incluso rechazo. Por eso, aunque tiene un potencial estético interesante, no se recomienda realizarlo en ojos sanos sin una evaluación médica exhaustiva.
¿En qué consiste la operación?
Dependiendo del método elegido, el procedimiento varía:
- Implante de iris: Se realiza una incisión mínima para colocar un implante de silicona del color deseado sobre el iris natural. Aunque puede parecer una solución simple, el riesgo de infecciones, inflamaciones o desplazamiento del implante es alto.
- Despigmentación láser: Se emplea un láser de baja intensidad que elimina gradualmente la melanina del iris, logrando un aclaramiento progresivo. Sin embargo, este proceso puede derivar en hipersensibilidad a la luz, aumento de la presión intraocular y pérdida de agudeza visual.
Ambos procedimientos son irreversibles, por lo que es imprescindible contar con asesoramiento profesional antes de decidirse por esta cirugía.
El láser es la única opción médica para reducir la melanina del iris. Otros métodos naturales, como infusiones o dietas, no tienen evidencia científica y pueden poner en riesgo la salud ocular.
Riesgos de la operación
El cambio de color de ojos mediante cirugía puede parecer atractivo, pero es importante conocer los posibles riesgos antes de someterse a este procedimiento:
- Infecciones o rechazo del implante: En el caso de los implantes de iris artificiales, el cuerpo puede reaccionar negativamente, generando infecciones o la necesidad de retirar el implante.
- Glaucoma: La alteración en la estructura del iris puede provocar un aumento de la presión ocular, dañando el nervio óptico y causando pérdida de visión.
- Inflamación crónica: Tanto el implante de iris como la despigmentación láser pueden desencadenar una respuesta inflamatoria continua en el ojo.
- Fotofobia severa: La eliminación de melanina del iris puede generar una hipersensibilidad extrema a la luz, dificultando actividades cotidianas.
- Pérdida de visión: En algunos casos, el procedimiento puede afectar la agudeza visual de manera irreversible.
- Desprendimiento de retina: Aunque poco común, las alteraciones en la estructura del ojo pueden aumentar el riesgo de desprendimiento de retina, una condición que requiere cirugía urgente.
Operación del cambio de color en España
En España, la cirugía para cambiar el color de los ojos aún no está completamente regulada, por lo que no todos los centros oftalmológicos la realizan. Además, es clave diferenciar entre clínicas que ofrecen este procedimiento con fines meramente estéticos y aquellas que priorizan la salud visual del paciente.
En la Clínica Ocular Antonio Moreno, contamos con un equipo de especialistas en oftalmología que te asesorarán sobre los riesgos de la operación, garantizando un enfoque médico y seguro.
Hola estoy interesada en cambiar el color de ojos pero presento una cirugía previa de LASIK (año 2006) para corrección de miopía. Cuál sería el procedimiento más seguro en mi caso?
Hola Amanda, muchas gracias por tu consulta.
En casos como el tuyo, con una cirugía LASIK previa, es fundamental realizar una valoración personalizada para determinar cuál sería el procedimiento más adecuado y seguro para cambiar el color de tus ojos. Existen diferentes técnicas, pero no todas son recomendables para todos los pacientes, especialmente si hay intervenciones previas.
Quedamos a tu disposición para concertar una cita cuando te venga bien y poder estudiar tu caso y asesorarte. Estaremos encantados de ayudarte.
Un cordial saludo.